Grandes o pequeños, con espinas o sin ellas, redondos y chatos o altos y esbeltos, naturales o artificiales… A pesar de su naturaleza áspera, los cactus han logrado ganarse un hueco en los corazones de much@s amantes de la decoración, y es que son ideales para dar un toque natural y original a nuestros hogares sin precisar muchos cuidados a cambio.

Introducirlos en la decoración del hogar no es nada difícil, y es que existen tantos tipos, tantos tiestos y tantos productos de decoración inspirados en los cactus que es muy fácil encontrar uno que se adapte a tu estilo. Y cuidado porque son adictivos…¡en dos días podrías convertirte en la loca de los cactus!

Cactus naturales

Son preciosos y tienen un mantenimiento muy fácil, ya que lo único que necesitan es un espacio fresco e iluminado, una temperatura entre 6 y 20 grados y un riego muy moderado (en general, solamente cuando la tierra se haya secado): aproximadamente una vez a la semana en verano, una vez cada 10 días en primavera y cada dos o tres semanas en invierno.

Si tienes niños pequeños, ten en cuenta que hay muchos tipos de cactus sin pinchos o espinas que son probablemente la mejor de las opciones.

Figuras con forma de cactus

Si los naturales requieren pocos cuidados… ¡estos ya son los más aptas para despistad@s!
Aunque están inspiradas en los cactus naturales e imitan sus formas y colores, lo cierto es que en muchas ocasiones tienen un aire más dulce que los originales. Entre las múltiples opciones puedes encontrar figuras de cerámica, de madera o de metal con forma de cactus, figuras de cactus con luces LED o cactus de fibras naturales como yute o algas.

Otra manera de introducir los cactus en la decoración de tu hogar es a través de otros elementos decorativos como cuadros y láminas, velas o textiles como cojines.

Y tú, ¿ya les has hecho un hueco en casa?

Foto: Annie Spratt

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