Mini Cart
A estas alturas no hace falta que te digamos que lo natural está de moda. Lo está por varios motivos, como el que tiene que ver con el respeto al medioambiente o con la personalidad que es capaz de aportar a cualquier hogar. Es por ello que no es nada complicado encontrar productos de decoración con los dar rienda suelta a esa pasión por lo natural.
En este artículo vamos a darte una serie de consejos e ideas para que puedas disfrutar de estancias con un plus de naturalidad, con ese equilibro y esa calidez que siempre son bienvenidos. ¿Nos acompañas?
La sencillez como regla número 1
Uno de los beneficios que aporta la decoración natural tiene que ver con la sencillez. Suele ser un denominador común en aquellas viviendas en las que se convierte en la gran protagonista, puesto que se trata de un estilo en el que no hay grandes variaciones de color ni formas complejas. El objetivo no es otro que alcanzar la armonía respetando los tonos naturales a través de la madera y las fibras vegetales.
La siempre bienvenida atemporalidad
Que esté de moda no quiere decir que sea una moda pasajera. Todo lo contrario, es un tipo de decoración con la que acertarás hoy y mañana, ya que la atemporalidad es uno de sus rasgos más distintivos. Alfombras de colores tostados, cojines de yute beige, tapices de macramé… Son solo algunos ejemplos que dicen mucho de una apuesta por lo neutro con la que es muy difícil equivocarse.
En perfecta armonía con el entorno
Da igual que vivas en la gran ciudad, en una avenida transitada por miles de coches a lo largo del día. Si te decantas por la decoración natural, sentirás que estás un poco más cerca de la naturaleza. Eso sí, tendrás que poner de tu parte para buscar ese equilibrio. ¿Cómo? Permitiendo que entre luz natural y velando por el orden y la limpieza de todas las estancias, algo que sin duda alguna redundará en vuestro bienestar. Los elementos naturales deben manifestarse tanto en los muebles como en los pequeños detalles, y en ese sentido no podemos olvidarnos de las plantas y las flores, con las que lograremos esa conexión con la naturaleza tan deseada.
Flexibilidad y versatilidad
Otra de las ventajas de decorar con productos naturales tiene que ver con las facilidades que nos dan a la hora de introducirlos en distintos estilos decorativos. Solemos pensar que el rústico es el más apropiado, pero lo cierto es que encajan a las mil maravillas con otros estilos como por ejemplo el nórdico, el industrial, el boho o el navy. Es cuestión de atreverse y buscar combinaciones con sentido.
Artículo recomendado: Claves de la decoración de estilo boho natural.
Los colores más apropiados
Si hablamos de colores, es inevitable mencionar una pareja que no puede llevarse mejor: el blanco y la madera natural. Con el blanco tendrás ambientes luminosos y te ayudará a resolver el problema de la escasez de metros cuadrados. Sin embargo, también debes considerar el verde por su relación con la naturaleza, y no puedes olvidar que los tonos pastel y las fibras vegetales son capaces de transmitir una dulzura y una serenidad que van más allá de lo que solemos ver en las habitaciones infantiles.
La reina de los textiles
Es cierto que va a gustos, pero no se puede negar que la decoración natural ocupa un lugar privilegiado en el mundo de los textiles. Solemos ver manteles, tapetes, cortinas, cojines, tapices, ropa de cama… En invierno se convierten en nuestros grandes aliados contra el frío, mientras que en verano se dejan notar en tejidos más vaporosos y ligeros.